En comparación con su predecesor, el BB 512i ha experimentado una serie de cambios detallados. El parachoques delantero se ha equipado con un alerón aerodinámico tras los estudios realizados en el flamante túnel de viento de Pininfarina. Esto mejora la estabilidad a altas velocidades. Los intermitentes delanteros se deslizan en la fina lámina del parachoques y las luces traseras son ahora redondas en parejas de dos en lugar de tres. Se ha instalado una toma de aire Naca en la parte inferior de los laterales, delante de la rueda trasera, para optimizar la refrigeración de los frenos. El techo también se ha modificado ligeramente, como resultado del trabajo en el túnel de viento. Para dar al coche un mejor agarre al suelo y mejorar aún más su manejabilidad a altas velocidades, las ruedas se hicieron más anchas y del mismo tamaño delante y detrás, haciendo la carrocería 3 cm más ancha.