Puede que no guste a los amantes del 3200 GT y sus faros traseros en forma de boomerang, pero la nueva versión Coupé representa una evolución significativa para Maserati. Es cierto que el estilo de la parte trasera se ha vuelto un poco más corriente, pero por otro lado, la cadena cinemática y los acabados han mejorado considerablemente. El motor biturbo de 3,2 litros y 370 CV ha sido sustituido por un nuevo V8 de origen Ferrari. Con 390 CV, esta unidad atmosférica tiene un carácter fuerte y corre más que su predecesor, si no mejor. Pero sean cuales sean los tiempos por vuelta, este motor es un placer de conducir. Otra novedad de este Maserati es el uso de la transmisión F1 de Ferrari, rebautizada Cambiocorsa, que permite cambiar de marcha desde el volante. Una auténtica delicia.